domingo, 14 de agosto de 2011

Mami y Papi

Yo debería invitar a mi hombre a celebrar el día de la madre mañana, aprovechar que es feriado para verlo, aprovechar que es su día para darle la sorpresita a mami. -Feliz día Ma, este es el mae que me chupa las orejitas y por el que se me levanta hasta el espíritu- le diría. Ella y él se pondrían rojos y no sabrían qué decir ni de qué hablar. Yo seguiría diciendo -a mí me encantan sus nalguitas Ma, son del perfecto blanco y del adecuado suavecito, digamos como algodones de azúcar, de hecho así les digo yo, verdad mi amor? contále- y él desearía morirse y mi mamá que yo me muera y como nadie habla yo tengo que y digo -amorcito a mi mami no le gustan los lances, a ella le gusta que su hijo tenga un novio serio y formal, verdad mami que pendejos que solo quieren sexo aquí no?- y mi mami tratará de escapar a la cocina y él de salir corriendo por donde entró pero yo los detengo con -bueno guapuras comamos rápido porque la verdad ando un poco cachondo y siempre he querido usar la cama de mami como nidito de amor, y como hoy es su día y se va ir de fiesta nos puede dejar la casa y el cuartico para nosotros solos- y le diría a él en voz más bajita -es que el colchón de ella es más suavecito-. Luego me acercaría a mi mami y le daría un besote en el cachete y al oído -gracias por quererme así, bien gay y bien vulgar, sos lo mejor que me ha pasado en la vida-. Después me acercaría a él y le daría el besote en la boca y al oído -vaya métase al cuarto que le voy a dar un adelanto de lo mejor que le va a pasar en la vida-.

lunes, 8 de agosto de 2011

El mae nuevo

Me había censurado por varias semanas para no escribir de él, más bien me he censurado para que no sepan de él. Las razones son varias, falta de estimulación y de inspiración no, el cabrón me aporta harta de las dos. Son otros los motivos. El primero que ya son varios los nombres que han pasado por esta playada de blog y lo que menos quiero es que él se sienta menos especial de lo que es, menos particular, menos único, que se espere un final como el de los otros y que considere mis letras más burdas y sencillas de lo que son. El segundo es, si bien yo quiero ser muy Madonna y voy por el mundo diciendo ¡a quién le importa!, que si la gente leyera las culioladas que le he escrito a este mae nuevo en mi libretita de papel bond van a pensar una de dos cosas (los más hijoputas las dos): que soy un mentiroso o que soy una puta. Claro, mentiroso porque es imposible sentir lo que yo siento por él después de exponerle al mundo lo que sentí por el anterior. Y claro, puta porque del anterior me acabo de despedir y ya estoy haciendo de mi culo un florero. El último de los motivos es simple, llano y trillado: miedo. Miedo de imaginarme lo que esa cabecilla pelona piense cuando lea en este blog, que según él ha leído tantas veces, las cosillas floridas que le he dicho solo a él en versión sms. Miedo de que se asuste, miedo de que se empalague y miedo de que, lo digo una vez más, se sienta menos especial por estar mencionado en este ya prostituto diario. Pero hoy, después de recibir las últimas cursilerías de su parte en mi celular decidí mandar a la mierda a la censura junto con las hojitas bond de la libretita. Porque aunque esta putada la pueda leer playópolis entera yo le estoy escribiendo lo siguiente solo a usted: Piojo, yo no necesito estar casado para tener un cuchumeme, yo no necesito que el tiempo me diga cuándo y de quién me tengo que enamorar, yo no necesito sufrir mi pasado para gozarme el presente y usted no es el mae nuevo, usted es el mae. Me voy pal’ party con usted.