¿Sabés
como me presentan? Él es Esteban, Esteban Quirós, el del referendo. Me hace
gracia, yo creo que eso se quedo perennemente.
Me dice orgulloso de que así sea,
porque en Hollywood perder el anonimato es perder la tranquilidad, pero en la
Tiquicia gay que es tan pequeña y tan falta de ídolos es precisamente eso, un
motivo de orgullo. Y no fue premio por “salir del clóset” (eso Esteban lo hizo
hace ya casi 20 años), fue premio porque hace 1 año este señor fue clave en un momento
histórico para las minorías sexuales costarricenses. Por eso es Esteban, el del
referendo.
¿De dónde salió el impulso para
presentar ese recurso de amparo?
Era
algo personal, yo lo presenté y pasó todo eso tan impresionante que yo dije ‘juepucha’ de verdad que
uno tiene que hacer las cosas cuando uno tiene el deseo de hacerlas, porque si
no lo hubiera hecho en ese momento probablemente hubiera seguido el referendo y
a estas horas estaríamos terribles.
A estas horas hace un año y un
poquito más se discutía si las uniones homosexuales deberían ser validadas por
el voto de los costarricenses. La abogada Alexandra Loría y compañía se
embarcaron en una recolecta de firmas en iglesias y calles, las firmas fueron
presentadas al Tribunal Supremo de Elecciones como prueba fehaciente de que la
mayoría deseaba decidir por la minoría. Se dio luz verde al que muchos llamaban
‘referendo del odio’ hasta que Esteban Quirós presentó ante la Sala IV un
recurso de amparo que argumentaba que tal iniciativa lesionaba sus derechos como
ciudadano costarricense, así como los tratados internacionales que pretenden
erradicar la discriminación de cualquier tipo y a los que Costa Rica está
suscrito. El 10 de Octubre del 2010 la Sala estuvo de acuerdo con él.
Yo
pienso que Alexandra es súper conservadora, yo creo que ella es de esas que
dicen ‘yo quiero mucho a los homosexuales, a las lesbianas y a todo el mundo
pero no quiero en mi familia uno de esos’. Es una persona culta académicamente
hablando pero inculta en lo que se refiere a las relaciones personales, en su
forma de ver a las personas diferentes me parece que adolece de toda
sensibilidad. Eso es lo que creo de ella.
Cuando uno es activista comparte
los ideales de su colectivo, cuando uno es activista el enemigo de uno es el
enemigo de todos. A Esteban se le doblaron los enemigos de un día para otro.
El
viaje anónimo
Siempre
he sido muy estudioso, lo que si te puedo decir es que de chiquillo odiaba las
matemáticas, hasta la fecha todavía lo odio. Y Educación Física, lo odio.
También me gustaba jugar carritos y con 2 o 3 muñecas que tenía mi hermana (se
ríe) Y amo a mi mamá, sobre todas las cosas.
Esteban es oriundo de San Pedro y
el menor de 3 hermanos. Hace 3 años que vive con su novio pero aún se confiesa
apegadísimo a su familia, eso sí, mucho más a su madre y a su hermana; a veces
confesarse homosexual te distancia del resto de los machos de la familia, tan
maleducados en las cuestiones de la hombría y la sexualidad.
La auto aceptación como
homosexual, ¿cuándo llegó?
Mirá
yo me di cuenta de lo que yo era a los 12 años. Escuché a una maestra que
estaba hablando con otra en la escuela porque había un profesor que era muy
afeminado, entonces una le dijo a la otra ‘ese es un maricón’ y la otra le dijo
algo de homosexual. Yo me acuerdo que me acerqué a la niña y le pregunté que
era homosexual, ella me dice ‘eso es algo terriblemente feo, es un hombre que
hace cochinadas con otro hombre’ y entonces yo me asusté y dije ‘juepucha, eso
es feo y yo soy uno de esos, mejor no digo nada’. En ese momento asimilé que a
mi me gustaban los hombres.
El destape ante los demás llegó a
los 15. La primera fue su madre: “mami soy gay”. El resultado es prácticamente
costumbre en el seno de las familias católicas que reciben un hijo o una hija
homosexual, así como la Quirós Salazar, se sueltan el llanto y las
recomendaciones: psicólogo y sacerdote “porque usted tiene que cambiar”. Era
1993 y dice Esteban que la gente creía que si le cortaban el pelo a un
gay al estilista se le pegaba el sida, así de precaria era la situación y
de escasa la información.
¿Esa reacción de su familia y la
situación del país en general lo inspiraron a luchar por la reivindicación de
las minorías sexuales?
Pues
a ciencia cierta eso no comenzó ahí, sino más bien cuando yo trabajaba en
salud, en los EBAIS de San Pedro. Durante ese tiempo conocí de todo,
homosexuales, lesbianas, transgénero y pude ver lo que sufren en general las
personas que no pertenecen a las mayorías de cualquier tipo. Si sos gay te
discriminan, si sos negro te discriminan y si sos mujer te discriminan, y te
estoy hablando de espacios tan delicados como la salud. Ahí me empecé a
sensibilizar por el tema.
Quiere
un curul de trinchera
Esteban Quirós se formó como
técnico en salud en la Universidad de Costa Rica. Se graduó como abogado en la
Universidad Fidélitas. Ahora ha vuelto a la UCR para especializarse en
Desarrollo Comunitario y Derechos Humanos con una maestría. Pero la verdadera
meta son votos, eso como todo, lo admite sin timidez.
Se habla mucho en las redes
sociales de su futuro en la política, ¿qué hay con eso Esteban?
Es
un plan serio, lo que pasa es que no es sencillo. Más o menos desde diciembre
me puse a analizar y a preguntarle a la gente por las redes sociales si hemos
tenido personajes de la comunidad gay en la política y varia gente ha
contestado, y que sí que tal ex presidente y que aquel ministro y no sé qué.
Con esto me quede analizando que de nada nos ha valido tener tanta gente de la
comunidad en la política porque siempre prevalece el criterio del partido
político al que pertenecen. Entonces ahora sí es un plan serio.
A Quirós lo acompaña en la
empresa el abogado Marco Castillo, redactor desde el 2005 de varios proyectos
de ley que aspiran a equiparar las uniones civiles homosexuales a las
heterosexuales. La idea de un partido político que lleve como bandera a las
minorías sexuales no deja de sonar extravagante hoy, y eso que ya no estamos en
el 93. El muro en Facebook del perfil de Esteban se llena de opiniones y
comentarios cada semana: “lo de un partido gay es quimérico, noble intención
poco realista”, “como acto de visibilización está bien, pero como realidad ante
un congreso futuro no” o “no tengo problema con que se tengan ganas de hacer un
partido político nuevo pero hay que hacerlo bien, no utilizando las
herramientas de politiquería y demagogia”.
Un partido como el PAC ha tenido
históricamente una apertura a los temas de diversidad sexual, ¿iniciativas como
las de este partido le parecen insuficientes?, ¿su partido es una necesidad?
Sí,
me parecen súper insuficientes y te voy a decir porqué: el asunto con ellos es
que la discusión nunca se acaba. Está bien discutir pero llega el momento en
que hay que tomar acción. Si vos tenés muchos intereses vas a priorizar los que
más capital político le den a tu partido, un partido de defensa de los derechos
humanos lo que va a hacer es defender el proyecto Sociedades de Convivencia a
costa de lo que sea, actualmente nadie está dispuesto a hacer eso.
El
futuro le brilla en los ojos
De la boca de Esteban, el del
referendo, sale lo predecible: sí quiero
ser diputado, ahí falta gente que llegue y le diga a nuestros detractores las
cosas como son, sin pelos en la lengua. Usted
nunca ha visto ahí una persona defendiendo con verdadero fervor a la comunidad
gay. Y lo no tanto: No me veo casado,
estoy súper feliz con mi pareja y no
estamos buscando el derecho de casarnos, pero ahí está el tema, yo no lo busco
pero el derecho tiene que estar disponible para el momento en que yo me quiera
casar, sea mañana que cambie de opinión o en 10 años.
Como él mismo lo dice, es un tipo
normal que tuvo los 15 minutos de fama que a todos nos tocan alguna vez. La
cuestión es que lo que quiere Esteban no se logra en 15 minutos, o por lo menos
no lo que se espera de él. Al tipo le dieron muy poco tiempo y mucha, pero
mucha responsabilidad.