No es suficiente que el número
cambie, yo voy a poner de mi parte y me voy a tomar unas 1000 o 1001 pastillas
muy muy poderosas. Mejor 1000, la intención no es morirme, solamente perder la
conciencia y la memoria, no me interesan esas mierditas de codificar, almacenar
y recuperar información. Entonces, voy a ser otra cosa, ya perdió el chiste ser
uncarajillomuymuygayqueescribesobreelloydesdequeterminóconsuexsoloescribesobreélcosasaburridasyrepetidascomosuvidamisma
y por eso me apetece despertarme como otra cosa, quizás un macho bien macho y
rebautice esta vara “los muchachos de antes sí sabían patear el balón” o mujer
y lo cambio “los muchachos de antes si sabían darme orgasmos”. La cuestión es
que me aburrí de mí y de esta lloradera y esta quejadera y esta rosadez. Si me
los topo en la calle y no los reconozco perdón, fueron las pastillas. Si me ven
en la calle y no me reconocen, felicítenme.
Puta, ¿qué es esta vara rosada en mi
brazo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario