domingo, 1 de agosto de 2010

En defensa propia

Mis más sinceros perdones a todas ustedes niñas bonitas, que en mi historial fueron minoría. Mi intención nunca fue engañarlas de la forma que lo hice. Mis ademanes de galán, sonrisas de coqueto y caricias inocentes no las forcé, tampoco las sentí, pero eso no fue culpa de ninguna. Discúlpenme si les hice creer que en mí encontrarían al jovencito de sus sueños y que en 8 o 9 meses encontrarían al hombre merecedor de sus flores virginales. Perdón, ahora saben que si en algún momento iba a estar cerca de su flor, iba a ser para adornarla. De verdad perdón Ale, Mónica, Karla, Lucía, Andrea, Mari, Melisa, Pamela y a la chiquilla guatemalteca de cuyo nombre la verdad no me quiero acordar.

También para ustedes mis perdones chiquillos, que me descubrieron a mí en pleno descubrimiento. Con ustedes no forcé nada, pero tampoco los sentí lo suficiente como para quedarme. Espero no me guarden rencor por lo efímero de mi actitud y me encuentre al menos entre los cinco mejores besos de su historial, digo, modestia aparte, soy bueno. Iba a mencionarlos a ustedes también, pero no quiero exigirle tanto a la memoria.

A todos, si los herí, les aseguro fue en defensa propia. ¡Llámenme! No no, mejor me textean.

3 comentarios:

  1. original disculpa, no habia leido algo asi.

    ¿como disculparse ?

    Aunque no sé si sea por la preferencia sexual (en el caso de las niñas) o en el completo "amar sin amor" (en ambos casos)

    como haya sido..........muy original.

    Saludos.

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  2. Un día de estos estaba yo pensando en escribir algo así. De verdad que que cantidad de chiquillas uno se llevó entre las patas (a veces literalmente) en ese proceso de descubrirse...

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  3. jajaja no jodás, yo te abrazo en la u, no te texteo guapo! ;)

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